top of page

10 CLUBES ARGENTINOS


Esta vez nos ponemos melancólicos y recordamos 10 clubs argentinos, de antes y de ahora, lugares que nos hicieron vivir grandes momentos de felicidad, donde la música se torna protagonista y se apodera de quienes la bailan hasta que salga el sol.

Seguramente bailaste en alguno de estos y pasaste las mejores noches de tu vida. En la nota en cuestión, vamos a retribuirles algo de todo lo que nos dieron y ahondaremos en la vieja historia de estos mágicos lugares para conocerlos mucho más.

 

Pacha

Si se habla de la rica historia que posee la música electrónica en el suelo argentino, si o si hay que mencionar y destacar al mítico lugar por donde la gran mayoría pasó alguna vez, el inigualable Pacha.


Ese lugar fue más que una discoteca, ahí se gestó una cultura que continúa hasta la actualidad. Fue la cuna de la escena electrónica local que comenzó en 1993 y cerró en 2016.



Allí surgieron los primeros amores por este estilo musical y donde la escena de Argentina empezó a hacer eco por todo el mundo. De ser un simple punto en el mapa para los DJs, a ser uno de sus lugares predilectos y favorito por todos.


En su momento tuvo un brillo esplendoroso y perteneció a una época que fue perdiendo su mística a medida que el negocio se hacía cada vez más masivo. El punto de quiebre para la escena local fue la tragedia de la Time Warp, en 2016. A partir de allí y por problemas legales, la famosa cadena que surgió en Ibiza en 1973, tuvo que cerrar sus puertas en tierras albicelestes para siempre.


Sin embargo, la rica historia que posee este lugar permite que lo recordemos como uno de los mejores. Por acá pasó Madonna, Chris Martin, Depeche Mode, Maradona, Coppola, Luis Miguel y más. La gente de la tele aparecía en Pacha, las modelos que estaban en las tapas de las revistas también. Ricardo Fort, cuando aún no era aquel excéntrico empresario que supo ser.

Por la famosa cabina estuvieron todos: Desde las primeras mezclas de un joven y rapado Hernan Cattaneo que todavía no había pisado Europa, hasta los históricos Fatboy Slim, Deep Dish, Paul Van Dyk, Chemical Brothers, Sasha, Above & Beyond y muchísimos más.


Lo que pasaba en el mítico club ubicado en Costantera, luego se replicaba en otros lados. En la reunión de los dueños de las franquicias, los españoles se preguntaban qué pasaba en la sede de Buenos Aires, de dónde salía esa energía.


Sin embargo, ir a Pacha no era para cualquiera. Para los que no tenían auto, el traslado hasta la Costanera era difícil porque apenas pasaban los colectivo (algo que sigue sucediendo en estos días). Pero además el ingreso era complicado: había que conocer a alguien, estar en una lista o pagar una fortuna. A pesar de esto, la diversión estaba garantizada. Moda, glamour y tragos de calidad; Pachá fue top.




Te dejamos una de las últimas noches del mítico club de la mano de Jay Lumen en 2016


Ahora el lugar reabrió, pero bajo otras manos y con otro nombre, Moscú. Su música varía entre la cumbia, reggaetón y pop en la pista principal. Afuera, en la terraza, mantiene la mística de la música electrónica y los amaneceres junto al Río de la Plata, aunque ya nada es lo mismo.


A pesar de no poder revivir aquellas noches que quedarán para el recuerdo, quienes tuvieron la suerte de estar allí, saben que como Pacha, nunca hubo y habrá otro.


 

Big one / Palacio Alsina / L´Inferno / State / Club one

Ubicado en el barrio de Monserrat a pocos pasos de la 9 de Julio, la discoteca fue sin duda una de las más famosas en los años 90. Para quienes no lo recuerden como Big One, tal vez lo hagan como Palacio Alsina o L’Inferno. Una construcción hermosa, con orígenes comerciales de principios de siglo XX brindaba un espacio de apertura y libertad para todos.


Con una capacidad aproximada de 1800 personas en sus tres pisos, llegó a ser uno de los más colmados en su época de mayor esplendor. Ofrecía barra libre por un costo no muy elevado, música electrónica, house, gunky y pop.


Palacio hizo historia en la noche porteña, pasó por varios nombres pero más o menos la esencia siempre fue la misma. Allá por el ´96 se llamó III Milenio, luego al año siguiente subió un número más y pasó a ser IV Milenio los viernes y los sábados L’Inferno.


En su infraestructura se destaca una pantalla led que abarca toda la parte trasera del escenario hasta cubrir todo el techo de la pista, dándole una inmensidad aún mayor.


Entre aquellos nombres más destacados se encuentra el paso de Carl Cox, Sven Väth, Joris Voorn, Tiesto bajo el legado de Palasio Alsina por el 2005.





 

Crobar / Buenos Aires News

Antes de su llegada en 2006, funcionaba la discoteca Buenos Aires News. El lugar que acogió el desembarco fue CABA, más precisamente en el barrio de Palermo en los míticos Arcos del Sol situados al lado de Av Libertador y a pocos metros del Hipódromo de Palermo



Introducimos en Buenos Aires la mejor música electrónica de Sudamérica, con un concepto visual y estético nunca visto", se auspiciaba en la página oficial de Crobar tras anunciar esta gran noticia.


Para aquel entonces, esto conmocionaba a todos aquellos que eran habitués de la electrónica en la ciudad porteña. Para tener una idea del renombre de este club, en la sede neoyorquina se presentaba el grupo de hip hop más popular de aquel momento, Black Eyed Peas.


Sin embargo, el Crobar que todos conocen y que alguna vez visitaron, generó un gran auge del Techno en Argentina, siendo uno de los principales clubes del género. Gracias a esto, su gran infraestructura y la calidad de artistas que pasaron por allí, el club fue reconocido dentro de los 100 mejores del mundo por la revista DJ Mag en varias ocasiones (2019: Puesto 63, 2020: Puesto: 51, 2021: 56).



Así describe la revista británica al club porteño: "La rama de la marca con sede en Buenos Aires es uno de los superclubes más reconocidos de Argentina por su producción excepcional y reservas de talentos estelares. Tiene un tema futurista, con un techo alto pavimentado con paneles LED y láseres luminosos que recubren las paredes del gigantesco espacio. Considerado una institución en Argentina, el club ha visto previamente a Sven Väth, Amelie Lens y Booka Shade hacer la banda sonora del lugar y, a fines de 2019, organizó un Boiler Room con el dúo electrónico HVOB, el artista en vivo Juan Hansen y la DJ Victoria Engel".


Durante sus más de 10 años de historia, los grandes animadores del mundo electrónico pasaron por allí, debutando en marzo de 2006, nada menos que con el mismísimo Tiesto. Desde ese entonces, la música pasó a tener un papel fundamental en su agenda y su cabina no dejó de brillar.


Marc Romboy haciendo lo que más sabe en Crobar 2019


Armin Van Buuren y Sander Van Doorn pasaron por allí, figuras del techno y el house como Carl Cox, John Digweed, Dixon, Vitalic, Sven Vath y Ricardo Villalobos supieron llenar de música la pista en los últimos años, sumando a esta lista otros grandes nombres como Nina Kraviz, Ben Klock, Len Faki, Guy J, Chris Liebing, Monika Kruse, Christian Smith, Tale of Us, Eelke Kleijn, Kölsch, y muchos más.


 

Caix

Caix es uno de los boliches históricos de Buenos Aires, ubicado en la costanera norte y frecuentado por varias generaciones durante más de 30 años de existencia. Abrió en 1991 donde tuvo un gran éxito y se mantiene vigente hasta estos días, pero ya no con la electrónica como protagonista.


Muchos son los motivos de su éxito: la infraestructura amplia, con un sector descubierto además de la sala principal, paredes totalmente de vidrio con vista al Río de La Plata, sus tarimas para quienes querían lucir sus pasos y luces móviles que combinan con los tonos desteñidos los sillones. Por acá solían encontrarse a personajes de la farándula, el deporte, de la música y a todos los que querían disfrutar de una buena noche a pura fiesta.


Tras el fatídico accidente de la Time Warp, Caix se vio obligado a cerrar sus puertas por un tiempo, aunque nada volvió a ser igual. Las nuevas generaciones llegaron y empezaron a frecuentar otros lugares de moda, por lo que el mítico boliche con vista al río quedó a un lado.


Si bien hoy se mantiene con algunas fiestas, son la minoría los que asisten a ella, mientras que el Reggaeton y Cachengue tomaron protagonismo absoluto.


El amanecer junto al río era uno de sus principales atractivos con los DJs Top del momento.


 

Bahrein

Ubicada en pleno corazón del microcentro porteño, más precisamente en un antiguo edificio bancario de 1904 “La Buenos Aires Building”, Bahrein propone en sus 2000 m2 de infraestructura, una experiencias de primer nivel que brindan al público nacional e internacional noches para el recuerdo.

Este club es una propuesta que apunta a cubrir el amplio espectro del circuito nocturno mediante tres alternativas diferentes que pueden funcionar tanto de manera conjunta como independiente.


Sus grandes salones de estilo están equipados con sistemas de sonido, iluminación y video que logran imponentes efectos visuales. Además cuenta con el famosos sótano que le adjudicó el gran presente que posee.


Por allí pasaron una gran cantidad de DJs como Amelie Lens en sus primeros años D-Nox, The Yellow Heads, Agents of Time, Pole Folder, Barts Skils, sumado a una infinidad de artistas nacionales de primerísimo nivel.


En esta parte de Bahrein se encuentran las imponentes bóvedas del antiguo banco transformadas en una pista de baile para música electrónica con capacidad para 500 personas. La cabina del DJ esta minuciosamente diseñada y equipada con la más moderna tecnología.


Sus luces y ambiente al estilo underground le dan el toque característico para que sea uno de los lugares favoritos por DJs de todo el mundo y amantes de la electrónica.


The Yellow Heads en el aniversario del club en 2018

 

Cocoliche

Cuando se habla de techno en la ciudad de Buenos Aires, lo más seguro es que la palabra Cocoliche se les venga a la cabeza a más de uno. El mítico club de la capital argentina estába ubicado en pleno microcentro porteño desde el año 2003. Con el paso del tiempo y de las noches, logró adjudicarse el rótulo de institución techno por excelencia del sur del continente.



Antes de que Rivadavia 878 se convierta en la cuna del Techno , los dueños eran unos yankees, el lugar en ese momento tenia como nombre, Full Bar. Con un poco apego con la gente y una mala experiencia con unos argentinos que los terminaron robando, los yankees decidieron ahí nomas cerraron el club.


A partir de ahí, es cuando el sueño de Udolph (nombre artístico de Adolfo Gabriel Cortes) comenzó a hacerse realidad. Empezaron a abrir en el 2003 con una habilitación de bar, donde los primeros meses fueron un éxito, superando las expectativas de todos. Su inauguración denotó la necesidad de la gente por querer salir a bailar.


Sin embargo, las mejores cosas no llegan de la nada, sino que siempre sucede algo que le da ese toque mágico al relato. Pocas semanas antes de la apertura de Cocoliche, les roban todos los vinilos a Udolph con los que iba a tocar. Ante esto, el padre de Carla (una de las actuales las socias del club) dice: "Tienen dos opciones, o se quedan acá llorando o se van mañana mismo a Europa a comprar discos", y así fue.

Se fueron unas semanas de recorrida por Barcelona, Berlin y Londres. En ese viaje conocieron a Ostgut Ton (sello de Berghain). Junto con ellos hicieron un tour de disquerías y volvieron dos días antes de la reapertura de Coco con dos bolsos llenos de vinilos con lo último de lo último. Entre risas, Udolph comentaba: "Las primeras veces que toqué esa música, creo que hasta flasheaba más que ellos por que agarraba un disco, lo ponía y como todavía ni los conocía, viajaba con la música".


Pero... ¿Cómo surgió el nombre Cococliche? Udolph te lo cuenta:

"Un año antes de abrir habíamos visto con Mariano DC una película que se llama Acid House, cuenta tres historias, una de ellas es de un pibe que se llama Coco Brice, tiene un trip re limado, le cae un rayo y cambia de cuerpo con un bebé. Aparece en el cuerpo de un bebé, en una cuna, viendo como los padres tienen relaciones... Bizarrisimo, cuando vuelve a su cuerpo, lo hace gritando "Im Coco, im Coco". Terminó la película y Marian dice: "Nosotros cuando tengamos un boliche tenemos que ponerle Cocoliche, por que es el boliche de Coco Brice..." y así quedó hasta estos días.


La famosa entrada de Cocoliche en Rivadavia 878, Buenos Aires.


Los años pasaron y el nombre de Coco se fue corriendo de boca en boca llegando hasta todos los rincones del mundo. A uno de los que le llegó fue al histórico, Sven Väth..


"Una noche estábamos limpiando el club antes de abrir, golpean la puerta y era Sven Väth con la Groove Magazine en la mano: leí en el avión que este es el mejor club de techno en el continente, así que quiero chequearlo. Con el club cerrado pusimos a sonar un set y se quedó bailando con sus amigos en la pista, empezó a caer la gente, lo veían ahí a Sven, se corrió el rumor y de repente teníamos una cola de una cuadra para entrar al club. Pasó lo inevitable y terminó haciendo un setazo hasta la mañana."


No por nada Resident Advisor lo catalogó en el ranking de clubes con el puesto 39 a nivel mundial.

 
La Fábrica

Había una vez una fábrica de Cemento, en la zona de La Calera, Córdoba. Era una de las primeras y más importantes de Argentina, justo al costado del rio y rodeada de arboles y montañas. Era tan grande y solida que no pudieron demolerla, por lo que sus estructuras principales se mantienen aun firme.



En este impresionante contexto, que parece salido de un cuento, nace LA FABRICA: un proyecto único llamado a hacer historia en el entretenimiento nocturno de la ciudad y el país.


Era un lugar abandonado de cemento que después de haber querido ser dinamitado en los ´80 para conservar el terreno para otras actividades, estuvo 30 años abandonada. Hasta que en el 2012 se construyo un club nocturno abierto con dos pistas y en 2014, La Fabrica paso a ser un lugar exclusivamente de música Underground.


La Fábrica es un club montado sobre una vieja estructura industrial en La Calera, Córdoba. Duramente estos años el recinto ha cobijado a los principales DJs del mundo, basta con recordar que Nick Warren, luego de tocar durante seis horas, produjo un disco llamado La Fábrica en honor al lugar.


El club mezcla ruinas, herrumbre y tecnología, tiene también proyecciones sobre paredes semi demolidas, iluminación en chimeneas, tanques y silos.


Por segundo año consecutivo, La Fabrica obtuvo el segundo lugar en la encuesta anual de DJ MAG, reafirmándose como lugar característico en Córdoba: un lugar masivo al aire libre con una estructura impactante.


Por allí pasaron Richie Hawtin, el showcase de Drumcode con Adam Beyer a la cabeza, el ciclo de Ultra Resistance con Jamie Jones, Adriatique, entre otros.


Marco Carola dando cátedra en 2016

 

Pueblo Límite

Pueblo Límite se convirtió en el gran referente de la noche atlántica, por sobre todo en la época veraniega. Reconocido por sus enormes dimensiones, ofrece variada de servicios y pistas que transforman a una salida en una experiencia única y para todos los gustos.


Vibe, la pista de electrónica ubicada en la parte techada de Pueblo Límite.


Pueblo Límite es más que un boliche. Es un inmenso complejo nocturno que dentro de sí tiene una gran cantidad de pistas: Urbano, Sushi Club, Kravi, Vibe, The Roxy, You, y Terrazas conforman el complejo Pueblo Límite, en las puertas de Villa Gesell.


Una de ellas, Vibe, es el lugar donde los amantes de la electrónica se sumergen de lleno para disfrutar la música en una sala rectangular con sector VIP en la parte superior/lateral de la misma. Esta cuenta con sonido e iluminación de última generación en el que prestigiosos DJ's internacionales y locales se lucen.


Algunos de los nombres que hicieron sonar su música fueron Paul Oakenfold, FatBoy Slim, Claptone, Kolombo, Green Velvet, David Guetta, Guy Gerber, Above & Beyond, por mencionar algunos. Lo curioso de todo esto es que con sólo pagar la entrada general (valor de $200/$300 de aquel entonces), podías disfrutar de un verdadero show hasta las 7 am.


Cuando tocó David Guetta en una de las pistas principales en 2012, (obviamente un Guetta al estilo EDM y música Mainstream) la entrada costaba $200 pesos. Algo inimaginable hoy en día.


Con el paso de los años, la ciudad de la Costa Atlántica se pobló en el verano de adolescentes y dejó de ser un punto turístico y de visita por quienes llenan las pistas electrónicas de baile, mudándose a Mar Del Plata.


Debido a esto, los DJs hicieron lo mismo pero de vez en cuando, Pueblo Limite se prepara para algunas fiestas con artistas nacional de primer nivel.


 
Mint / El Cielo

El Cielo marcó la agenda de la noche porteña durante los ´90. Un lugar a puro glamour donde el Top de los Top de la gente iba para disfrutar de una verdadera fiesta. En los VIPs podías encontrarte con Maradona, Coppola, Macri, Menem, empresarios, políticos y mucho más. Pero luego de oscuros sucesos vinculados con la farándula y el mundo empresario (numerosos inconvenientes con los papeles, registros de la marca y el caso Poli Armentano), El Cielo cayó en decadencia.



Tras esta mancha negra que quedó impregnada en un lugar donde pisaron una gran cantidad de DJs internacionales, lejos de cerrar sus puertas, los inversores decidieron cambiarle el nombre y darle lugar a Mint.


Bailar hasta que salga el sol y seguir. A diferencia de otros boliches, la puerta de vidrio que daba a un extenso patio junto al río permitía que los primeros rayos de luz del amanecer se entremezclaran con las luces artificiales que rebotaban en la bola de espejos.


En Mint, la noche siempre era caliente y la madrugada bien fresca. Llegar era fácil, pero irse de Mint no era sencillo: la misma historia que Pacha y todos los boliches de la costanera, un único colectivo que pasaba por el lugar (siempre lleno) y que por lo general no te acercaba a ninguna parte.


Pero antes, cuando la noche estaba en pañales, Mint siempre estaba a la altura de las expectativas: Dj's internacionales, techno y las mejores fiestas del mundo cituadas en un mismo lugar: Space de Ibiza y Chemitry de Holanda.


Sus tremendas presentaciones internacionales los días viernes con Tiesto, Muriel Fowler, Richie Hawtin, entre otros, logró ocupar un espacio entre las discos mas solicitadas a la hora de buscar diversión y un buen ambiente.



Mint abría los viernes y sábados a la medianoche con una capacidad para 1900 personas, dos sectores VIP, terrazas cubiertas y descubiertas, cinco barras, estacionamiento privado, climatización, pasarelas, escenarios, pantallas gigante y con la posibilidad de montar esctructuras y carpas para eventos.

 
La Boite

La Boite es el espacio referente de la música electrónica en el norte argentino donde grandes artistas locales, nacionales e internacionales se presentan cada fin de semana.


Emplazada en una de las principales arterias del microcentro de la capital tucumana, en poco tiempo, se posicionó como el club nocturno de mayor identidad en la provincia, y como uno de los referentes mas importantes de la escena electrónica del país.


Es un boliche que abrió sus puertas en agosto de 2004, cuenta con una capacidad para unas 1300 personas en el mainfloor electrónico (tiene más o menos la capacidad del sótano de Bahrein) y además posee otra pista de electrónica mas chica.


Todos los fines de semana traen a un artista internacional menos un sábado al mes donde hace el "Sábados entre casa" con artistas nacionales en el horario central.


Boris Brejcha, Guy Mantzur, OXIA, Guy J, entre muchos otros... fueron algunos de los que pisaron el suelo tucumano e implantaron su música en el que es considerado por muchos residentes, el mejor boliche de electrónica de toda la provincia.



La Boite siempre tuvo los objetivos muy claros: Priorizar siempre lo musical por sobre lo económico. El club tuvo ese factor que lo destacó por sobre lo demás. Sin importar el momento ni la situación, siempre que alguien iba a La Boite, la calidad del artista fue de primer nivel.

5049 visualizaciones0 comentarios

Entradas recientes

Ver todo

Comentários


bottom of page